El técnico de
Oriente Petrolero durante la semana planificó el sistema para los partidos en ciudades de altura, debió jugar dos (Bolívar y San José), pero por cosas que solo pasan en nuestro fútbol solo terminó jugando uno, en la ciudad de Oruro.
Con un sistema distinto a lo que venía mostrando en Santa Cruz, Eduardo Villegas se la jugó ante muchas críticas previas por el 1-5-4-1 que había decidido para jugar ante los “santos”, este esquema le dio resultado al estratega verdolaga ya que ante muchas ausencias por lesiones (Añez, Sejas, Lizio, Algarañaz, Freitas y Peña) tuvo que echar mano de jóvenes jugadores que en algunos casos venían teniendo muy pocos minutos de juego.
El equipo cumplió a cabalidad lo planificado por Villegas en la primera etapa, fue sólido defensivamente hablando ya que a Quiñónez solo le llegaban con remates de larga distancia, todos se brindaron al máximo en cada balón y fruto de ello el equipo local no supo cómo llegarle y el primer tiempo terminó sin goles ya que
Oriente Petrolero el único peligro que generó fue con un remate de Villarroel que fue bloqueado por un defensa de San José.
En el complemento la seguridad que el equipo del estratega cochabambino había mostrado en la primera etapa no fue la misma, ya que en muchas ocasiones se lo notó desordenado producto de salir con otra mentalidad, ya que el equipo salió a buscar un poco más arriba al rival y producto de ello, una presión de Helmut Gutiérrez hizo que el balón le quede a Moisés Villarroel que de primera la mandó a guardar poniendo al albiverde 0-1 arriba, pero con la intención que querer liquidar el encuentro el equipo siguió mostrándose desordenado en la última línea y producto de una mala salida se pierde el balón y un rebote le queda a Saucedo que no perdonó a Quiñónez para poner el 1-1, parecía que se le venía la noche al plantel de Villegas porque el local buscaba por todos los medios ganar el partido, los nuestros ya mostraban cansancio, pero una guapeada de José Alí Meza nos dio el segundo tanto y los tres puntos de oro que bale esta victoria conseguida en Oruro con el resultado final de 1-2.
Ante mucha presión de la parcialidad Orientista por considerarlo defensivo, Eduardo Villegas planificó un sistema conservador que le generó muchas más críticas, se la jugó por algunos jugadores resistidos, tuvo que llevar jugadores que no venían teniendo minutos debido a lesiones de varios considerados titulares y aun así fue fiel a la idea de juego que tenía para su equipo en Oruro y su recompensa fue conseguir la victoria, victoria que él creía que se podía conseguir con ese sistema y al final fue así y Villegas se la jugó y su equipo ganó.