Oriente Petrolero sufre para ganarle a Sport Boys
Fue un partidazo el que se vio en el estadio Juan Carlos Durán, donde Oriente Petrolero y Sport Boys se midieron por la sexta fecha. Los albiverdes vencieron con un apretado 4-3, después de ir ganando 4-0 en el primer tiempo. Los warneños reaccionaron, pero no les alcanzó para al menos igualar.
La tarde de viernes se vio pagada para los más de 7.000 hinchas que fueron al estadio de Real Santa Cruz, ya que vieron siete goles, tres expulsiones y muchas emociones que ofrecieron los jugadores de ambos equipos.
Oriente Petrolero ganó porque fue cien por ciento efectivos en el primer tiempo y porque encontró un Sport Boys que dio muchas ventajas.
Lo liquidó rápido
Más fácil imposible. Así se presentó el partido para Oriente, que fue cien por ciento efectivo ante un Sport Boys que jugó su peor partido en lo que va del torneo. Alí Meza no encontró resistencia y se convirtió en la figura al anotar tres tantos en menos de 15 minutos.
Ni bien comenzó el duelo, los dirigidos por Xabier Azkargorta tuvieron presionaron en campo rival, pero dejaron espacios en zona defensiva, por lo al minuto los de Eduardo Villegas abrieron la cuenta. Algarañaz recibió un balón en el medio campo y sin dominar cedió un pase a las espaldas de los defensores del Toro, donde Alí llegó en velocidad y tras ingresar al área superó la marca de Grenddy Perozo, luego amagó a Carlos Arias y definió con la zurda. La mayoría de los hinchas en el estadio Juan Carlos Durán festejan la temprana apertura.
Pero había más para los albiverdes, que dejaban que su rival tenga la pelota y se equivoque para matar de contragolpe. A los 5’, nuevamente la misma fórmula produjo el 2-0. Algarañaz robó un balón en tres cuartos de cancha y de nuevo le cedió un pase por la derecha a Alí, que ni bien ingresó al área cruzó fuerte y volvió a vencer a Arias.
El 2-0 parecía mucho, pero era un premio a la efectividad de Oriente Petrolero, que a los 14 minutos volvió a apuñalar al Toro. Otra vez, se repitió la fórmula Algarañaz-Alí. El venezolano recibió el balón dentro del área y ante la salida de Arias lo levantó y puso el 3-0. Era increíble la efectividad del equipo de Villegas y el desastre defensivo de Sport Boys.
El encuentro parecía liquidado, pues el juego no cambió. Oriente seguía esperando y el Toro tenía la pelota, aunque no causaba daño al arquero Billy Viscarra.
A los 38’, Algarañaz tuvo su premio al anotar el 4-0. Villarroel recibió el baló en el medio y cedió un pase a las espaldas de la defensa rival donde ganó Carmelo y con el pie derecho lo colocó por arriba de Arias. Así terminó el primer tiempo.
Un cambio total
La reacción de Sport Boys parecía imposible, pero los cambios de Azkargorta dieron resultado. Alejandro Meleán ingresó por Porozo, Alexis Messidoro por Jair Torrico y Marcos Ovejero por Vogliotti.
El Toro fue agresivo y se fue con todo en busca del descuento. Castillo y Edivaldo se perdieron dos chances claras, debajo del arco, pero ya avisaban mucho peligro de los azules. Por su lado, Oriente se fue quedando y perdió volumen en el medio y mucho más en el ataque.
A los 64’ llegó el primer tanto del Toro. Edivaldo cabeceó un tiro de esquina de Messidoro y venció a Viscarra para poner el 4-1. De ahí el partido se hizo de ida y vuelta, mucho más con el ingreso de Maximiliano Freitas, por Lizio, aunque el uruguayo se perdió una chance clara de gol, lo mismo que Enrique Áñez, que solo disparó desviado.
La expulsión de Mercado y Johnny Mostasilla, a los 75’, complicó a Oriente, ya que se vino abajo y Sport Boys aprovechó, a pesar de que le expulsaron Coimbra. A los 79’ Ovejero anotó de cabeza el 4-2 tras un rebote que dejó Viscarra que no pudo contener un fuerte derechazo de Danny Bejarano dentro del área.
Todo era del Toro. A los 91’ el árbitro cobró penal un choque de Villarroel con Ovejero, que se dejó caer dentro del área y sorprendió al juez que apuntó el punto de los 12 pasos. Desde allí Castillo fue efectivo y puso el 4-3, sobre los tres minutos de adición, por lo que no hubo tiempo para más. La gente se fue contenta porque vio un partido con muchas emociones.
Fuente: DIEZ
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