Un clásico es un clásico y no es permitido perder, sea este amistoso u oficial, hay que salir a dejar la piel en la cancha, meter pierna fuerte, corretear todas las pelotas habidas y por haber, buscar el “GOL” con esmero.
Eso fue lo que hizo
Oriente Petrolero en el primer tiempo, dio todo de sí para abrir el marcador y fue de esa manera que fue dueño del partido desde el minuto 10 en adelante del primer tiempo, un Oriente dinámico, que salía jugando, que tocaba a ras del piso, con un Thiago enchufao y con ganas de mostrar que quiere ser titular, prueba de ellos fue que durante los primeros 45 minutos tuvimos varias oportunidades de gol, una de ellas generada por el mismo Thiago que saco un zapatazo desde fuera del área que obligo al Gordo Suarez a estirarse y sacar la pelota al córner, hubieron otras jugadas como la falta de coordinación entre Saucedo y Peña, otra entre Peña y Pariani y otra entre Saucedo y Pariani, un primero tiempo totalmente atractivo para el hincha Albiverde.
Pero qué pasó en el segundo tiempo, si todo fue tan bien en el primer tiempo ¿Por qué perdimos el partido? El partido se perdió por “UNA MALA LECTURA” de Tito Pompei, un cambio inesperado que nadie estuvo de acuerdo, saca al mejor hombre que había tenido Oriente hasta el momento y mete al español de la Cuesta, habría que consultarle a Pompei si Thiago estaba cansado o estaba dolorido de las patadas que recibió del equipo contrario. A los 5 minutos se viene el otro cambio que tampoco nadie esperaba, entra Mateo Zoch y sale el otro desequilibrante que tenía el equipo Alcides Peña, no niego que el chico Zoch no tenga habilidad, tiene y bastante pero hay que tomar en cuenta que Peña tiene experiencia en este tipo de partidos. A partir de ese momento Oriente perdió en todo, luego se vino el cambio de Rodrigo Vargas por Saucedo, y de Alan Mercado por Pedro Azogue…. Creo que más de uno seguirá preguntándose qué pensaba Pompei para hacer esos cambios, o es que los jugadores estaban cansados, o en realidad quería cuidar jugadores, ¿Para qué? ¿O pensó que íbamos a llegar a los penales? Al minuto 10 del segundo tiempo no podemos pensar en esas cosas si no en mantener el esquema que venía desde el primer y que le estaba dando resultados, porque quitaba y salía tocando, generaba peligro en el área contraria.
Para completar los malos cambios que hizo, el banco de suplentes fue tan pobre, que no teníamos un delantero en la banca, no teníamos quien reemplace a Pariani que termino cansado de tanto corretear en busca del pase de última línea que en el segundo tiempo nunca llegó porque el medio campo se cortó completamente.
Estoy seguro que más de uno de los que fuimos al estadio o que vieron el partido, no entienden porque no reemplazo a Ortiz, Ortiz no hizo un partido ni mínimamente aceptable ni este domingo ni el anterior, es un defensor que deja mucho que desear, por ese lado “B”looming nos hizo mucho daño y fue por donde llegaron al córner para el primer gol y por donde se entró Salinas para hacer el segundo.
Pompei tiene muchísimo trabajo, creo que las incorporaciones de Raldes y Marvin nos vendrán muy bien para poder potenciar la zaga y afianzar el lateral izquierdo que ahora mismo es una lástima y es por donde nos generaron las llegadas, hay que apurarlo a Melean para darle partidos y que pueda ir agarrando ritmo para la sudamericana..
Sigo pensando que el partido de ayer Oriente debió salir a ganar, no a empatar ni a perder, Oriente es un equipo que tiene que salir a ganar siempre, en especial los clásicos que son los partidos donde se juegan más que los 3 puntos en juego o el premio, es un partido donde hay que dejarlo todo, donde te jugas el orgullo, te jugas las cargadas del equipo contrario durante toda la semana…. Lamentablemente para Pompei al parecer eso no cuenta.
Cabe recalcar que aquí no estamos en contra ni del entrenador ni de ningún jugador, estamos haciendo un análisis de como jugó Oriente y de cómo lo planteo el técnico, como actuaron los jugadores y qué teníamos de recambio… espero la dirigencia pueda llegar a leer esto y pueda apreciar de que a este paso no vamos a ningún lado.