Oriente golea y se clasifica

Oriente golea y se clasifica

Oriente fue un equipo fino, agresivo y contundente en el primer tiempo y fue otro, muy distinto, relajado y mezquino, en el segundo, cuando fácil pudo haber derrotado a Nacional Potosí, no por 4-1, sino por un marcador más amplio. Al final, con esos desajustes y todo, se anotó otra victoria, es puntero en su grupo y, de paso, se tomó la revancha del único equipo que le ganó en lo que va del torneo Apertura de la Liga.

La goleada empezó rápido, antes de los 2 minutos, con un tanto de Wílder Zabala. Oriente comenzó atropellando a su rival con un juego rápido, preciso y abierto por las bandas, en una jornada feliz para Alejandro Schiapparelli (volvió a jugar tras casi siete meses de ausencia) y de infelicidad para Juan Carlos Arce, que salió expulsado en el segundo tiempo y se perderá, inicialmente, el próximo partido ante La Paz Fútbol Club.

Volviendo al primer tiempo, se vio a un Oriente punzante y dueño de la pelota, para el delirio de su hinchada. La superioridad era tan clara que hasta el minuto 20 ya ganaba por 3-0. Gualberto Mojica anotó el segundo gol a los 12’, de tiro penal, y a los 19’ Alejandro Delorte convirtió de cabeza el 3-0 después de un tiro de esquina que cobró Mojica.

Parecía un partido fácil para el local, por las situaciones de gol que generó en el arco de Eder Jordán, pero se complicó solo porque no lo liquidó cuando debía. Nacional Potosí no encontraba el rumbo y le costaba frenar las arremetidas de Arce, por un lado, y las proyecciones de Zabala, por el otro. Oriente se hacía fuerte de media cancha hacia arriba y en algunas jugadas sacaba ventaja en el juego aéreo gracias a los casi dos metros de estatura del ‘Gigante’ Delorte. Fue poco lo que hizo la visita en esa primera etapa para aspirar al descuento, porque todo era del local.

En el segundo tiempo cambió la figura. Oriente se mostró relajado (lo admitió su técnico al final del partido) y en cambio Nacional creció con el ingreso de Edgar Escalante y de Gabriel Ríos. El atacante cruceño, que juega en el cuadro potosino, rápidamente fue amonestado por sus reclamos airados al árbitro. Más tarde, cuando Oriente ganaba por 3-0, pero dejando sentir un bajón, Ríos metió un frentazo tras un tiro de esquina de Torrico para el descuento de la visita, a los 70 minutos.

Ese gol comenzó a desesperar a varios jugadores de Oriente y más de uno perdió la cabeza, Mojica y Arce entre ellos. Nacional Potosí había crecido, y mucho, aprovechando la pasividad de Oriente, que inexplicablemente se metió atrás para resistir la presión de la visita. A los 79 minutos ambos equipos se quedaron con uno menos por las expulsiones de Ríos y Arce. Con los ánimos exacerbados y con Oriente intentando volver al protagonismo, Miguel Hoyos apareció en el momento justo, con una peinada tras un córner de Mojica, para sellar la victoria (84’). Con la tranquilidad del 4-1, Ramacciotti hizo tres cambios sobre la marcha, entre ellos Schiapparelli. El ‘Gringo’ apenas pudo tocar un par de pelotas, suficiente para rencontrarse con su hinchada que aplaudió su ingreso y coreó su nombre.

Tiro libre

Expulsado. Marcos Ramacciotti se fue expulsado por reclamar al cuarto árbitro. El hijo del DT de Oriente se fue molesto por la decisión del juez.

Asustado. El árbitro Irusta se asustó cuando Arce y Ríos casi generan una pelea campal. No sabía si expulsar a ambos. Se puso caliente el partido.

Querido. El ingreso de Alejandro Schiapparelli arrancó más de un aplauso en la tribuna. El argentino se ha convertido en ídolo de los hinchas refineros.

Ríos casi provoca una pelea campal
Gabriel Ríos estuvo solo 30 minutos en cancha y en ese tiempo fue un infierno. El delantero de Nacional Potosí ingresó con los ánimos alterados y con ganas de desenfundar su ira contra cualquiera. Ingresó por Gary Paz en el minuto 46 y a los 62’ ya tenía amarilla, por insultar al árbitro.
Futbolísticamente era buen aporte para su equipo, porque mejoró Nacional y en cambio los nervios acorralaban a Oriente. Sin embargo, lo peor de Ríos se produjo con su gol, a los 70 minutos, de cabeza. Sin motivo alguno el delantero provocó a la hinchada de Oriente (hizo un gesto para que se callen) y el árbitro, que estaba de espaldas, no se dio cuenta. Sin embargo, el que vio la acción y no informó nada fue el asistente Humberto Paz.
Esa acción fue calificada como un acto de provocación y a partir de ahí empezaron los roces. Mojica fue a buscar a Ríos y falló, pero el que lo encontró fue Arce, en una jugada cerca al arco de Oriente. La jugada era normal porque el ‘Conejo’ fue a rechazar un balón que estaba en juego y que había dejado rebotando Ríos. El atacante entendió que hubo intento de agresión y reaccionó. Hubo empujones entre jugadores de ambos equipos y por poco desencadena en una pelea campal. El árbitro expulsó a ambos y el partido siguió su curso, mientras Arce y Ríos se iban retando a golpes camino al camarín. La Policia intervenido oportunamente y ahí quedó todo, por suerte.

Minuto 90

Asistente polémico
Humberto Paz se llama el primer asistente que se hizo el desentendido cuando Gabriel Ríos provocó a la hinchada rival. Su silencio manchó el espectáculo.

La vuelta del ‘Gringo’
Schiapparelli ingresó cuando todo estaba liquidado (93’). Volvió a jugar luego de casi siete meses de ausencia.

El hombre del láser
La fotografía captó justo al espectador que utilizaba un láser para desconcentrar al arquero de Nacional Potosí. Los policías que estaban cerca ni se percataron de él.

La figura

GualbertoMojica
Equipo: Oriente
Puesto: volante
En cada partido demuestra por qué el DT Carlos Ramacciotti lo tiene como titular. Anotó un gol, de penal, y fue autor intelectual de los tantos de cabeza de Delorte y de Hoyos.

El ojo crítico

El duro
Santos Amador
Defensor
Golpeó mucho y no vio ni la amarilla
Es un jugador recio, que no mide su fuerza. Ayer arremetió contra Joselito Vaca y Wílder Zabala y el árbitro ni siquiera lo amonestó.

Premio limón
Gabriel Ríos
Delantero
Su actitud generó actos de violencia
Después de anotar su gol de cabeza, a los 70 minutos, hizo un gesto de silencio a la barra de Oriente y el árbitro ni lo amonestó.

Caído del cielo
Wílder Zabala
Volante
Se encargó de abrir la senda goleadora
El tanto que anotó antes de los dos minutos fue determinante. El lateral-volante cumple en la marca y también aporta con goles.

Fuente: El Deber